Elogio de un libro

Acabo de leer un libro que me encantó. Se titula “L’élégance du hérisson” ("La elegancia de un erizo") de Muriel Barbery. Lo leí en francés pero estoy segura que hay traducciones… y si fuese así me gustaría dar un humilde pero firme consejo para leerlo.

Los dos protagonistas, una conserje en su cincuentena y una joven muchacha de 12 años, hija de unos ricos papás socialistas que viven en un inmueble de lujo en pleno corazón elitista de Paris, comparten con nosotros sus pensamientos…

Pensamientos críticos, con mucho humor, y sobre todo con mucha naturalidad propia de las personas que saben reflexionar sobre su entorno…

La conserje resulta ser una persona culta, que lee, se interesa por cosas variadas, complejas, pero se esconde bajo el “disfraz” de alguien de su profesión o mejor dicho bajo el disfraz del estereotipo que los demás inquilinos del inmueble tienen de un conserje… es decir, alguien con poca cultura, pobre, sin gusto ni pretensiones…
Estos mismos ricos inquilinos que creen ser la crème de la crème de la sociedad resultan ser en su gran mayoría unos pobres de espíritu, vulgares, marujas de poca pretensión y cotillas de baja monta….

No quiero dar más pistas ni contar la trama del libro, pero es un libro que hace pensar sobre cómo vivimos, qué es lo que pretendemos ser a nuestros propios ojos, nuestros complejos, traumas, pequeñas tragedias a gran escala personal que puedan marcarnos o hacer cambiar de rumbo emocional y afectivo… deseos de ser comprendidos pero no a toda costa sino tal como somos… y sobre todo a mí me transmitió un fuerte sentimiento de que la vida es muy corta y que nunca se sabe lo que puede suceder y que lo importante es poder disfrutar de pequeñas y grandes cosas, de las personas que nos gustan y no dejar pasar las oportunidades de conocerlas… y la equivoca impresión que tenemos del supuesto control sobre nuestras vidas… y hasta cierto punto quizás lo tengamos, pero lo tenemos quizás en lo material, pero en cuanto a la vida, al amor, a la amistad, a la tristeza, frustración, pasión… ¿realmente tenemos este control?... ¿realmente es necesario tenerlo?... ¿realmente son controlables? …

Una de las últimas frases del libro me quedó grabada: la niña de 12 años que pensaba suicidarse después de incendiar el inmueble donde vivía con sus padres (bueno, suena muy gore pero en realidad está contado con un humor y suavidad extrema), al final cambia de idea y decide buscar “los siempres” en “el nunca”, la continuidad en el fin…

Al último carraspeo de moda o algunos ejemplos del susto indumentario

Me inspiro en este pequeño artículo de los ejemplos de cada día que voy viendo en las calles, en el metro, en los restaurantes… en fin… alrededor mío y que como mínimo me provocan una cierta gracia o sonrisa, pero que no me dejan estar callada…

The nightmare (la pesadilla)

Metro... un vagón cualquiera... Un ser muy maquillado, con un desesperado intento de parecer a Amy Whinehouse sobria, de la estatura de un taponcillo....con mayas negras que aprietan los muslos morcillas... Con un pelaje extendido por los hombros escasamente cubiertos por unos tirantes agujereados de color negro y con algún rastro de color rosa pálido que se entreve y que supone la sugerencia de un sujetatetas.... (sujetador no es lo más apropiado en este caso)... el abrigo que parece una manta edredonal que se arrastra por los suelos y así hace a la vez el efecto de escoba… El ser agarra con una mano el asa del bolso negro....estoy intentando deletrear una palabra en el asa... oh Cielos... The nightmare... es lo que se lee y en realidad hay que darle su merecido... al menos allí sí ha acertado... ¿Tendrá algo de coherencia primitiva?

Culo, caca, pene, pis

Un bar de copas… el ambiente es agradable, con música acertada y que permite hablar sin ejercer demasiada presión sobre las cuerdas vocales… gente amable con toque de cosmopolitismo… Entran un grupo de chicos… A primera vista de buen ver, atractivos, altos y entre ellos hay uno que además de todas estas cualidades que se ponen de manifiesto en un bar con alguna copa de más… tiene ojos de un azul intenso, limpio sin fondo… felino y tentador… Lleva vaqueros negros, americana y una camiseta que se aprecia como negra… Bien…muy bien y además estoy segura que no fui la única en fijarme en él… hasta que el chico se quitó la americana…. ¡¿Pero por qué lo hizo?!... ¡Toda la magia de la mirada sin fondo dio con el fondo del suelo del bar! La camiseta negra llevaba cuatro palabras en letras rojas… si… las que están en el título… ¡Que decepción!

La caperucita roja y los lobos pardos

Estación de trenes. Tren a Sevilla… Una chica joven que parece un semáforo en fase de luz roja estancada. Abrigo rojo, bolso rojo, maleta de plástico rojo chillón, pendientes rojos, labios rojos, supongo que la ropa interior si es que la llevaba también en rojo… Pelo rubio de frasco recogido en una cola con cinta… ¿de qué color?... muy bien, habéis acertado…roja! Con un cuerpo de palillo plano, eso sí enseñando los palillos sobre unos taconazos rojos que por mínimo despiste suyo la llevaría a tener la nariz también roja… (…quiero decir por si cae y se desmorona).

Al lado de esta caperucita de tiempos modernos estaba de pie una mujer joven atractiva, cuidada, majestuosa en su mirada… con un cuerpo interesante por explorar…

Lo que más me llamo la atención es que la mayoría de los hombres se fijaban en los palillos, con un cierto hambre en la mirada… los lobos pardos o pardillos que cuando ven una presa fácil… se les encienden las luces… rojas…

Los ricos herederos de savoir être y savoir vivre

Estoy bastante acostumbrada a oír decir de mi que mi forma de ser invita a pensar que actúo como si fuese una “rica heredera”… Y cierto es que soy “rica heredera” de mis orígenes, de mi educación, de mis antepasados, la riqueza duradera en realidad y que puede perpetuarse si la inculcas en los demás… Pero los que me dicen con medio bromita esta frase no van por ahí, de hecho creo que ni sabrían identificar la riqueza con algo fuera de lo material… En realidad confunden una vez más los conceptos y por consecuencia tergiversan la realidad… Y es que tengo mi propio estilo, elegancia, saber estar y saber vivir… lo que en francés se denomina “savoir vivre”… No me gusta ir por la vida hecha una piltrafilla, me siento mujer y me gusta usar todos aquellos atributos que ayudan a una mujer en su esencia pura femenina a resaltar este lado seductor, algo provocador, sensual y misterioso… Claro que también depende del entorno, de la gente que te rodea, pero hay unos mínimos a los cuales nunca podría renunciar… como puede ser un toque de un perfume sutil y evocador… una joya que salte a la vista y a la vez esté discreta en su esplendor…

A estas personas suelo decir que sé estar y disfrutar de lo que tengo y eso se me nota en la cara, en mi sonrisa, en mi forma de ser y ver el mundo… una forma muy abierta que admite todo tipo de posibilidades y no juzga…

Y luego pienso que hay muchos ricos (materialmente) herederos de sus papás que van por la vida sin estilo ni gracia, sin sesos ni cultura, dicen frases aprendidas u oídas en algún foro y que creen que puede quedar “guai” y en realidad son los pobres snobs que no tienen estilo propio ni personalidad como tal… Estos son los que van en masa vestidos de la misma forma, los que llevan las mismas joyas, compradas casi siempre en las mismas tiendas o “mercadillos de lujo” que de vez en cuando ofrecen las marcas en alguna suite de algún hotel de lujo, huelen al mismo perfume y llevan el mismo corte de pelo y de mirada…

Los verdaderos bons vivants son pocos hoy en día, los que saben captar la atención, los que entran en una habitación, sala, espacio abierto y entre una multitud atraen todas las miradas hacia ellos… ¿Y sabéis por qué? Porque hay algo en sus movimientos, miradas, gestos, forma de vestir que sugiere mucho más allá de una simple apariencia, de unos simples toques de riqueza material… ¿Estilo propio? ¿Personalidad que desborda? ¿Gusto sin gritos…de la última pasarela de turno y poco importa si queda bien o es de gritar pero a pulmón lleno de susto visual?... creo que si y luego, una vez la atención visual cautivada, saben continuar despertando el interés… intelectual… sine qua non por muy estiloso que vayan, tendrán el mismo efecto que un champagne cuyas burbujas se desvanecen, pero antes de llegar al paladar…

La economía sustemible

Me da rabia ver cómo un país con un potencial humano y de recursos aunque no sean ni petróleo ni oro, se hace devaluarse a si mismo, perder toda la credibilidad en la arena internacional por unos incompetentes zapatéticos que dirigen a bandazos este país.

Nos tuvieron meses ante la expectativa casi galáctica del encuentro histórico-universal entre dos colosos de la política contemporánea, léase Obama y Zapatero. Los pajes y pajines del gobierno español lo gritaban por esquinas hasta que llegó el día del encuentro, en realidad el día de oración (por cierto y de paso sea dicho, evento muy cristiano en su esencia). Obama llegó tarde, negó una vez más su tan vendida por los lameculos del gobierno español, visita a España y lo hizo delante del ZP cuyas cejas salían disparadas de tal sorpresa. En realidad, los calientasillas del gobierno español dieron bombo a una cosa que ni siquiera estaba confirmada… como siempre vendiendo la piel antes de cazar al oso (en este caso, al búfalo).

Luego llega Elena Salgado y pone un puntazo para la imagen económica y financiera de España. No se le ocurre otra cosa que acudir a la sede de Financial Times (FT) en Londres para defender con el pecho al aire, y no con los números en la mano, que España no va tan mal. Encima llega tarde a la entrevista (en fin ya sabemos que la puntualidad es una virtud y que en España las virtudes no son bien vistas hoy en día). Y digo yo, ¿una señora Ministra tiene que ir al Periódico para justificar al país que representa? ¿Qué imagen da del país con este gesto? Me cuesta imaginar al homologo inglés / o de cualquier otra nación que tenga respeto a si misma, desplazarse a la sede de “Expansión” (aunque también es verdad que las comparaciones en este caso no benefician a este último) para justificar cualesquiera gestiones de su gobierno.

He leído el artículo en FT, un artículo con muy mala leche y un sarcasmo feroz hacía la ministra. Encima resulta que en las puertas de FT se acamparon dos equipos de televisión española… sería para captar otro encuentro galáctico-universal. Y resultaron ridículos, ya que la ministra llego por la puerta trasera y estos tuvieron que correr detrás para captar imágenes, eso sí, preservando la mejor escuela de los paparazzi detrás de los famosillos.

Claro que hubo además la reunión con los inversores para convencer que España se porta bien y hará frente a las deudas actuales y futuras (si es que alguien se armará de valor financiero para prestar a este gobierno soplareformas). Curioso leer que según FT, los equipos de la TVE ni siquiera estaban al tanto. Digo que se prefiere mantener el anonimato de los posibles incautos de los inversores…

Mientras, el premio Nobel de economía, ex consejero a sueldo de ZP, Paul Krugman, predice que a España le espera todavía una racha dura con incremento de paro, y que la debilidad del euro no está en Grecia (país más pequeño por tanto menos relevante económicamente y estratégicamente), sino en España.

Pero España va bien, al menos los que rodean a ZP creen en ello ciegamente, nunca mejor dicho, ya que lucidez es algo que les falla. Hasta incluso han llegado a comentar que existe un complot contra España. Claro, como nos tienen envidia por lo bien que lo hacemos, pues quieren meter los hocicos y entorpecernos en nuestro bienestar social, político, económico y cultural. Claro como sabemos dar la limosna de 400€ a los que han agotado el subsidio por desempleo (en vez de crear puestos de trabajo y reformar el mercado laboral), claro como sabemos elevar la edad de jubilación a 67 años (eso sí, los diputados, senadores del partido socialista obrero (¿que es eso? Será del paleolítico socialista) español una vez obtenido el asiento y tras calentarlo durante poco tiempo tienen la pensión de por vida y no se ven en la obligación de cumplir con está edad; y me refiero aquí a los del PSOE únicamente ya que al menos los del PP aun haciendo en muchos casos lo mismo no pretenden tener la flor en la mano ni representar al ¿obrero?), claro como tenemos los dos dinosaurios sindicales (los que más cámara chupan y en realidad no representan ni siquiera a todos los trabajadores de este país) que mientras tienen la sopa y la silla calientes, pues no organizan huelgas, claro que como tenemos la patronal cuyo cabecilla parece un mafioso, pues por todo esto hacemos la envidia del resto del mundo. Es que no nos entienden y eso que saben que Spain is different.

Different por la incompetencia del gobierno, por la debilidad de la oposición (que tienen el momento idóneo para levantar el país y pedir dimisión del gobierno, pero como seguramente tienen miedo por si les pueda pasar algo parecido en el futuro, se quedan callados), por la pasividad de los ciudadanos (seguro que si por algún hipotético supuesto se va al carajo Real Madrid, todos salen a la calle, pero con el paro en aumento, mercado laboral lamentable, economía destrozada, arcas vacías y el futuro incierto no nos moverán para salir a protestar).

Eso sí, también somos different ya que tenemos un gran humo llamado la economía sostenible, que sostiene en el aire y nadie sabe exactamente lo que supone. Diría yo que más que sostenible es sustemible, ya que todo lo que toca ZP es para echar a temblar de temor de previsiones nada claras. Al menos Midas al tocar lo convertía todo en oro aunque murió ya que no podría comer…oro, el ZP lo convierte todo en paja… mental y espero que tenga una muerte política ya que no sabe crear para dar de comer a millones de parados. Me pregunto qué asesores tiene alrededor. Seguramente unos cuantos gurús vendedores de humo eso sí bien pagados que le tienen a ZP convencido que es el mecías político y económico y que sacará a España de las tinieblas del complot internacional. Si, seguramente la sacará…. fuera del mundo desarrollado, civilizado. Ya lo está haciendo y eso sí, hay que darle su merecido, es lo único que sabe hacer bien.

Carpe diem

Me considero una persona tecnológicamente avanzada a más no poder (nunca mejor dicho ya que el poder en este caso está sujeto a las limitaciones económicas)… pero tampoco soy fan de gadgets y no persigo cualquier novedad en el mercado con el ansia de superarme a mi misma y deslumbrar a los demás y poco importa si me aclaro cómo funciona el gadget de turno con tal de exhibirlo cada dos por tres con la frase tipo “Todavía no me he puesto con él”.

Sería apropiado describirme a mi misma como una persona socialmente integrada en las redes de todo tipo, a lo que añado que conocí a mi actual marido por Internet a miles de kilómetros de distancia hace muchos años. Fui una de las pioneras de encuentros online.

Hoy en día las redes sociales se diversifican, cada vez tienen más presencia en nuestras vidas, cada vez pasamos más el tiempo delante del ordenador tecleando nuestros pensamientos, sentimientos, secretos, imaginaciones y muy a menudo nos desnudamos las almas con mucha más facilidad a través de la pantalla que en vivo y en directo. Los tabues son menos acusados a través de la pantalla que en una conversación o el comportamiento diario… En fin, preferimos ser nosotros mismos pero que no nos vean la cara, antes de asumir lo que somos y vivir acorde con ello. Admiro a las pocas personas que lo hacen más allá del ordenador.

Es un fenómeno extraño, porque a la vez que uno se siente rodeado de gente en la red, en realidad, cada vez nos alejamos más de la gente, de nosotros mismos, de momentos placenteros, de oír una voz que puede suscitar sentimientos cálidos, de escuchar una idea acompañada con un gesto que en sí explica mucho más allá que la idea misma…
De ver la mirada del interlocutor, la sonrisa en los labios, o la crispación del desacuerdo e impaciencia de llegar a terminar una conversación. Vaya, la red nos priva de lo real, sentido, visto, oído, tocado…

Claro está que la red ayuda a mantener el pulso a los acontecimientos que surgen en las vidas de nuestros conocidos, amigos, parientes que por circunstancias de la vida viven alejados de nosotros… ¿Pero y los que están cerca?

Pues los que están cerca viven la vida corriendo de un lado para otro, crean ocupaciones y preocupaciones a veces poco, por no decir de ninguna forma, justificadas y nunca tienen tiempo a parar y respirar hondo… Mirar alrededor suyo, disfrutar del amanecer, de una nube, del susurro de las hojas de un árbol en el parque…

Cuando a diario cojo el tren, veo que la gente está oyendo música con ojos cerrados, o lee (que esto está muy bien, mientras no sean la prensa rosa y puramente deportiva ya que priva el cerebro de su desarrollo y adormece a las neuronas, en algunos casos las pocas que quedan por sobrevivir), pero en su gran mayoría y sobre todo los hombres, están absorbidos en los juegos electrónicos, móviles, portátiles… Y mientras, por las ventanas del tren se ve el amanecer… un día nuevo, desconocido, lleno de retos o de frustraciones, de indiferencia o de pasión, pero en todo caso un día que no se repetirá, ni el amanecer será el mismo…

Carpe diem quam minimum credula postero (Aprovecha el día, no confíes en mañana) como bien dijo Horacio…

Perdemos mucho tiempo en realidad en esta era tecnológicamente avanzada… Corremos cada vez más rápido, nos proponemos metas cada vez más difíciles de alcanzar, nuestros egos nos dominan cada vez más, y mientras los placeres sencillos de la vida como puede ser el olor del café recién molido, un buen vino y una buena conversación acompañado con una música suave, el olor de la lluvia, el canto de un pájaro o la inmensidad del horizonte quedan casi olvidados…

¡Viva la huevonería!

Estaba yo viajando tan tranquilamente en el tren de cercanías, en algún punto entre Atocha y Recoletos, sentada, rodeada de gente que leía y de repente mis ojos se alarmaron ya que vieron algo que no les dejó continuar apaciguadamente el resto del trayecto, simplemente recreando pensamientos placenteros acompañados con la voz de Diana Krall (no sé si por nombrarla, la SGAE me perseguirá para el resto de mi vida)….
Me preguntaréis qué es lo que vieron mis ojos… Pues bien, un anuncio en el periódico “Qué” del día 4 de febrero de 2010 (lo dejo para la posterioridad e inmortalidad del hecho). El anuncio decía así, literalmente en inglés, cito: “SMART HAS THE BRAINS, STUPID HAS THE BALLS. BE STUPID DIESEL ®. Traducción: “El INTELIGENTE (aunque la palabra “smart” también tiene significativo de “bien vestido”, “estiloso”, “presumido”, “chic”, “limpio”) TIENE CEREBRO, EL ESTÚPIDO TIENE PELOTAS (en más llano aún, huevos). SÉ ESTÚPIDO. DIESEL ®.

Es curioso, por no decir lamentable, ver hasta qué punto y hasta dónde puede llegar el mal gusto e incitación a ser mediocres, borregos, soeces, bastos, guarros y huevones. Triste es constatar que además estas “cualidades” abundan cada vez más y sobre todo entre muchos jóvenes… ¿promesas del futuro?... Claro está que no todos son así, pero lo que abunda por las calles son la huevonería y chandalismo (un neologismo). Y no me refiero únicamente a la prenda, que la uso yo también, pero única y exclusivamente para sudar en el gimnasio…
No se me ocurriría nunca presumir de un chándal, menos aun llevado con tacón y con maquillaje de la máscara de Nefertiti versión todo a 100 de los chinos. Pero a que veis a muchas con la pinta que acabo de describir. Esto en cuanto a las adolescentes que parece que forman las “juventudes de la Montera”. En cuanto a ellos… en fin… parece que aparte de llevar el chándal que, como hemos visto por el anuncio es un signo claro de tener huevos, pues encima estos mismos huevos les pesan… Y un último toque es que tanto ellas como ellos en su gran mayoría tienen la mirada de un rumiante.

Así que creo que los del anuncio se han equivocado al ponerlo en inglés… Porque los que lo puedan entender, no presumen de chándal… y los que puedan presumir del chándal no saben ni siquiera hablar en español decentemente…